Conde de San Cristóbal es un vino elaborado con una mezcla de las variedades Tinto fino, Cabernet sauvignon y Merlot procedentes de un viñedo con hasta 7 tipos distintos de suelos. El resultado es un vino muy fino que no pierde la nobleza de la zona, con una elegante potencia y con mucho carácter, en el que sobresalen los aromas de fruta fresca y toques minerales.